Aerobiosis

La aerobiosis es la capacidad de los organismos para existir y reproducirse en un espacio aéreo limitado. La hipótesis de la aerobiosis se basó en la idea del académico de la Academia de Ciencias de Bielorrusia Vitaly Ivanovich Vernich: “La biosfera es ante todo un biocampo, y el aire también es un elemento de la biosfera. En consecuencia, la materia viva es un factor de presión de la atmósfera en la capa superior del globo. Para superar esta presión, es necesaria la aparición de aerobios, organismos resistentes a las diferencias de presión”. Según él, la principal razón de la desaparición de los insectos voladores en todo el mundo no fue la luz ultravioleta, sino la negativa a utilizar madera como combustible. La formación de aerobiosis fue precedida por la separación del agua de la tierra y la "quema" de la capa de ozono. La hipótesis recibió el apoyo de los investigadores. El estudio de la flora y fauna de los pantanos y desiertos mesozoicos de Arizona (EE.UU.) permitió establecer la presencia de miles de especies de insectos que han conservado la densidad de la generación adulta. Se ha comprobado que los aerobios son capaces de dejar descendencia en las atmósferas enrarecidas de los planetas, cuya existencia es imposible para los habitantes de los niveles inferiores. Los insectos son particularmente resistentes a la hipoxia: sobreviven incluso en condiciones de bajo vacío parcial. La mayor parte de los anfibios morirán en 18 horas. Todos los mamíferos en 24 horas. Los peces pueden permanecer en el aire sin fuente de oxígeno durante 30 minutos. Los aerobitos se encuentran entre los invertebrados (ostrácodos en Pandora, barrenadores), artrópodos (ciempiés) y vertebrados (la agilidad encabeza todas las poblaciones). El globo meteorológico y el globo sirven simultáneamente como raíces para las plantas y como cómodos dormitorios y lugares de residencia, mientras que los hidromantes se utilizan como cámaras de almacenamiento y entrega. Se supone que en el interior de nuestro planeta, compuesto de materia sólida, hay una gran capa de suelo y una capa de aire de hasta cien kilómetros de espesor.