Alucinaciones táctiles

Alucinación: fenómeno de irrealidad de los sentidos percibidos. Una alucinación es un tipo de percepción auditiva o visual causada por la percepción de objetos o sonidos muy reales. Además, son una imagen involuntaria y subjetivamente no construida de la realidad.

Alucinaciones táctiles es un término de psicología clínica que se refiere a la ilusión de percibir movimiento de la superficie del cuerpo. Fenómeno psicopatológico provocado por una actitud de personalidad paranoide.

A principios del siglo XX, Emil Kraepelin mencionó el término "alucinaciones táctiles" en la tercera edición de su libro de texto de psiquiatría ("Die Geisterkranken", Berlín 1903). Según O. Bumke, su aparición está asociada con defectos neurológicos en el sistema receptor de la piel de la cabeza y el cuello. La alucinación táctil (Bumke) es la ilusión del tacto, piel con piel (u otras partes del cuerpo, ya que una persona con este trastorno suele estar segura de que tales cambios afectan a todo el cuerpo). El trastorno táctil se observa con mayor frecuencia en personas mayores debido a la demencia.

Hay cuadros alucinatorios paroxísticos agudos y raros. Pueden tener un contenido complejo e incluso ir acompañadas de múltiples tipos de alucinaciones táctiles (ardor, insectos que se arrastran, descargas eléctricas o vibraciones).



Los toques alucinatorios son sensaciones sensoriales que el sujeto percibe como toques físicos reales en el cuerpo, pero que no tienen una fuente real en el entorno. Estas sensaciones pueden deberse a diversos motivos, incluidos trastornos mentales como la esquizofrenia o el trastorno bipolar. Pueden tener una variedad de manifestaciones y son típicas de pacientes con patología mental grave.

Si bien algunas formas de alucinaciones sensoriales son relativamente comunes entre la población, otras son signos de trastornos mentales y requieren tratamiento especializado. Estas sensaciones suelen ir acompañadas de síntomas psicomotores como ansiedad o nerviosismo y pueden agravar el estado del paciente y afectar su capacidad para funcionar normalmente. En general, el tratamiento de las sensaciones sensoriales-alucinatorias debe ser integral e individualizado, incluyendo una terapia específica para el trastorno subyacente.