Ligamento talofibular posterior

Ligamento talofibular posterior - (l.talofibulare post.).

Este ligamento es una continuación del músculo astrágalo posterior (m.talaris posterior) y está unido al borde posterior del astrágalo.

El ligamento juega un papel importante en el mantenimiento de la estabilidad y el equilibrio del cuerpo. Proporciona una conexión entre el astrágalo y el peroné y también participa en la formación del arco del pie. Además, este ligamento puede dañarse debido a lesiones y enfermedades del sistema musculoesquelético.

El tratamiento de las lesiones del ligamento posterior talofibular incluye métodos conservadores como la inmovilización, la fisioterapia y la terapia con ejercicios. En casos graves, es posible que se requiera cirugía.



Las subluxaciones congénitas o adquiridas del astrágalo ocurren a cualquier edad. La dislocación de este hueso ocurre con más frecuencia en mujeres que en hombres debido a la insuficiencia de las fibras de colágeno de la cápsula. El término "subluxación" implica un subdesarrollo del aparato ligamentoso y una insuficiencia de los músculos estabilizadores.

De todos los tendones que conectan la tibia y la tibia, dos ligamentos son de particular importancia: el tibial anteroinferior (LCA) y el tibioperoneo posteroinferior (PCL).

Normalmente, se encuentran en un estado de fuerte conexión a la altura de los tobillos, lo que garantiza la estabilidad de la articulación de la rodilla. Cuando se dañan o se forma un obstáculo para el movimiento de la articulación de la rodilla, se desarrollan enfermedades de la rodilla. En conjunto, estas lesiones a menudo se denominan desgarros de menisco, que van seguidos de un desgarro del ligamento de inserción medial (LCA) o del ligamento posteroinferior (LCP), que además sujeta la tibia con respecto a la rodilla, compensando la fuerza extensora de la rodilla. la tibia que adquiere durante el movimiento.

Como es sabido, la articulación se considera un eje de rotación, con la cabeza de la tibia unida a la cápsula articular y a los huesos de la pelvis a través de tres ligamentos: el ligamento lateral, el medial y el ligamento cartilaginoso. Es decir, la articulación tiene tres accesorios principales. Estas inserciones consisten en músculos y fibras estiradas a lo largo de un ligamento llamado en latín corvis fibularis lateralis (ligamento del tendón lumbar extendido lateral), el anillo de anclaje medial (el anillo del músculo estabilizador del compartimento medial) o el ligamento humeral externo posterior. (ligamentum rotati externum El daño a estos ligamentos comienza debido a un traumatismo cerrado. Se produce un desplazamiento de la tibia, se produce una dislocación de la cadera hacia un lado. A diferencia del ligamento anterior, la subluxación de la tibia en el interior (síntoma de "rodamiento") no es acompañado de un fuerte desplazamiento hacia adelante, porque la mayoría de las veces se daña la estructura de la parte posterior de la rodilla. De todas las lesiones del componente tibial, la dislocación posterior es