Momificación Natural

La momificación es un proceso que se produce con los cuerpos de personas o animales fallecidos como consecuencia de la exposición al medio ambiente. Este proceso puede ser natural o artificial. La momificación natural se produce bajo la influencia de factores ambientales, como el aire cálido y seco y el suelo suelto y bien aireado.

La momificación natural puede ocurrir bajo una variedad de condiciones ambientales, pero ocurre con mayor frecuencia en desiertos y tierras altas, donde el aire seco y la falta de humedad son factores importantes. Los cuerpos de los fallecidos permanecen en el aire seco, lo que provoca sequedad y reducción del volumen de los tejidos. Además, la tierra suelta proporciona una buena aireación, lo que favorece un mayor secado de los tejidos.

El proceso de momificación natural puede tardar varios meses o incluso años, dependiendo de las condiciones ambientales y del tamaño corporal. Durante el proceso de momificación, los tejidos corporales se secan, se vuelven quebradizos y oscuros, y la piel se vuelve más fina y transparente.

La momificación es un proceso natural que ayuda a preservar los cuerpos de los muertos y protegerlos de la descomposición. Sin embargo, este proceso puede tener consecuencias negativas para el medio ambiente ya que requiere grandes cantidades de recursos como agua y energía. Por ello, muchos países prohíben el uso de métodos de momificación naturales y exigen el uso de métodos artificiales como el embalsamamiento o la cremación.



La momificación es un proceso natural de mineralización (entierro) de cadáveres humanos y animales. Durante el proceso, se produce un cambio gradual, como resultado del cual se restablece la similitud anatómica y los cambios químicos en los tejidos los hacen parecerse a los minerales. Todos los tejidos juntos forman una máscara mortuoria: la antroposfera de la momia. El proceso de momificación natural podría ocurrir como consecuencia de las características biológicas de algunos organismos, o debido a una combinación aleatoria y específica de diversas condiciones naturales, bajo las cuales la velocidad de descomposición de las sustancias orgánicas es más lenta que las capacidades naturales de los organismos vivos para autodefensa y autocuración. Es decir, sólo bajo la influencia favorable combinada de condiciones externas (por ejemplo, la influencia de un “clima cálido seco” con suelo bien aireado no puede acelerar el proceso de recuperación) puede un cadáver convertirse en un “agregado fuerte y duradero de un tipo mineral” - una momia.